27 de diciembre de 2021

Ekku (Eku o Eiku, un remo).

¡Hola, lectores!

Seguimos con la serie de armas antiguas de Okinawa (Ryukyu). Hoy les muestro cómo hacer un ekku (también eku o eiku), que no es otra cosa que un remo usado por los pescadores de Ryukyu, que por su practicidad frente a espadas, lanzas y naginatas, entró a formar parte del arsenal del kobudo.

Como todas mis armas, está hecho en cedriño, el mismo trozo de 1,60 m de largo del que hice los nunchaku y las tonfas con los recortes laterales de este ekku.

Materiales:

  • Cedriño de 1,60 × 0,10 m y 30 mm de espesor.
  • Lijas de 60 y 120.
  • Aguarrás.
  • Protector de madera (usé aceite de linaza).
  • Papel y trapos.

Herramientas:

  • Sierra circular.
  • Sierra caladora.
  • Cepillo eléctrico.
  • Cepillo manual (garlopa).
  • Bastrén .
  • Taladro.
  • Prensas.
  • Morsa.
  • Broca para madera de 5 mm.
  • Serrucho.
  • Escofina (lados plano y curvo).
  • Lima (lados plano y curvo).
  • Escuadra.
  • Lápiz.
  • Goma de pan.

Y sin más, vamos a ver el proceso.

Como siempre, comencé por dibujar en la pieza de madera el contorno de lo que quiero cortar, en este caso el contorno de un remo con la paleta de 0,67 m de largo y el cabo de 30 mm de ancho (igual al espesor de la madera). El largo total del ekku es de cinco shaku (), que son 1,515 m.

Los cortes largos de los laterales los hice en la sierra de mesa casera que ya publiqué, con el cuidado de parar el corte 15 cm antes de la base de la paleta del remo, porque en la cara de abajo la sierra llega más lejos que en la cara que se ve, por la curva del disco.

El truco acá fue no cortar en ángulo recto la base de la paleta, porque al sacudir el remo durante el kata o golpeando con el filo, se partiría con facilidad. Para curarse en salud hay que curvar la unión.

Dibujé el ángulo recto que cortaría, pero luego tracé una curva en el ángulo, valiéndome de una arandela de 35 mm de diámetro. En la foto: desde el borde de la madera hasta la línea a lápiz que está a la izquierda de la palabra "PALETA", se miden los 67 cm.

Seguidamente hice agujeros con la broca de 5 mm del lado del despedicio de la madera, tangentes a la línea curva que dibujé antes con la arandela.

Y finalmente con la sierra caladora removí los restos siguiendo la línea que tenía trazada y parcialmente perforada.

Los agujeros logran que la hoja de la caladora nunca se trabe al girar ni se parta la hoja, ya que va por un camino parcialmente ya cortado, uniendo los agujeros.

Para terminar la base, removí con la escofina los bordes y rebarbas que dejó el corte a sierra. Luego con la lima alisé las superficies borrando las marcas de la escofina.

En la foto debajo se ve el remo recién cortado.

El siguiente paso que tomé fue trabajar el lado que lleva dos caras rectas, a dos aguas como los techos de las casas. Con el cepillo eléctrico graduado en 0.250 hice varias pasadas con el aparato inclinado, llevándolo desde los bordes hasta la línea central.

Hay que aclarar que antes de cepillar, dibujé las líneas de centro en las cuatro caras. Esas son las guías para saber hasta dónde se debe cepillar. En la foto se ve la línea de una de las caras.

La cara opuesta a la de dos aguas es curva. Así que el proceso es el mismo que antes: rebajar la cara plana con el cepillo, desde los bordes, esta vez trazando una curva en vez de dos caras planas.

Otra cuestión a tener en cuenta es que la paleta es menos espesa en la punta que en la base, o sea que al cepillar se debe pasar más veces cerca d ela punta para poder ir formando una pendiente desde la base a la punta. Es decir que en la base va a tener los 30 mm originales, pero en la punta tendrá 20 mm aproximadamente.
El proceso no puede explicarse mucho, es algo artesanal y hay que hacerlo para entenderlo.

Los últimos dos cortes fueron: el del largo final a 1,515 m (medía 1,60 al principio), y la punta en forma de flecha. Arriba, detalle de la punta. Debajo, el remo entero.

Por último, lijé con papel de grano 60 todo el remo para eliminar astillas y marcas de las herramientas. Luego froté con un paño con aguarrás, y volví a lijar esta vez con grano 120 para alisar las superficies. Y para terminar apliqué el protector.

Siguen fotos de la paleta y la punta de flecha, con la protección de aceite de linaza ya aplicada.


Quedó un poquito más pesado que los otros que hay en mi dojo, pero la madera es también más dura. Y la paleta es un poco más gruesa también, así que se justifica.
Y así se ve en la mano.

 

Practicar con él es un placer, definitivamente sirve para ejercitar también la musculatura junto con las técnicas y el kata.

Les dejo el enlace al video del sensei de mi sensei haciendo el kata "Eku no Ho" de nuestro estilo de kobudo, Ryuei Ryu:

Por hoy es todo.
¡Hasta la próxima entrada!